Los desechos producidos por el hombre son un problema de contaminación en aire, suelo y agua. Afectan a los recursos locales del lugar donde se producen, ya que se consumen los recursos naturales para su producción y no se devuelven parte de éstos para continuar con el ciclo natural. Algunos de los desechos pueden ser reutilizados como recurso para un nuevo uso, según su fuente de origen.
En este tema se diferenciarán los conceptos de desechos y residuos, en cuanto a su potencial uso para el hombre. Después se mostrarán los colores asignados para cada tipo de residuo y desecho, y se describirá cómo se clasifican los residuos para su posterior reciclamiento. Enseguida, se enlistarán los pasos que se deben de seguir para el manejo de los residuos y se enlistarán los tipos de desechos reciclables y los que no se pueden reciclar. En otra sección, se explicará el proceso más común para reciclar los residuos de origen orgánico y se describirán algunos recursos materiales provenientes de los residuos orgánicos que se pueden utilizar como energéticos.
Después de estudiar estos conceptos podrás realizar una actividad que te ayudará a reafirmarlos. Por último, realizarás una actividad de autoevaluación con la que podrás corroborar si aprendiste los conceptos correctamente.
Es aquella sustancia o material generado por una actividad productiva o de consumo, y de los que hay que desprenderse por no ser de utilidad para la entidad que los generó, después de ser utilizados o parcialmente consumidos.
Otras definiciones son las siguientes:
Los residuos, que son productos de actividades humanas, pueden ser reciclados y reutilizados para la misma actividad u otro destino, evitando el uso de un recurso natural adicional y un procesamiento extra, implicando ahorros energéticos, al no invertir energía adicional para su transformación, proceso, transporte, mano de obra, etc. El manejo de los residuos de una manera responsable es una acción sostenible que aporta beneficios sociales (salud), económicos (por generación de recursos) y ambientales (al mitigar el uso de recursos naturales y disminuir la contaminación de aire, suelo y agua).
En términos generales, se habla de basura o desecho para identificar a aquellos materiales sobrantes que, en apariencia, no pueden ser usados nuevamente. En cambio, el término residuo se utiliza para identificar a aquellos materiales que todavía pueden tener valor en sí mismos al ser reutilizados o reciclados.
Para poder entender cómo darle un uso útil a un residuo necesitarás entender cómo se clasifican y separan los residuos de los desechos. Para lograrlo, por favor lee la siguiente sección.
La Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (SEMARNAT) ha emitido una guía para la codificación de los residuos sólidos, la cual es nombrada como "Guía de Diseño para la Identificación Gráfica del Manejo Integral de los Residuos Sólidos Urbanos” (SEMARNAT, 2014).
SEMARNAT. (2014). La clasificación cromática para el manejo integral de los residuos sólidos urbanos [tabla]. Tomada de http://www.semarnat.gob.mx/temas/residuos-solidos-urbanos
SEMARNAT. (2014). Iconografía de los sólidos según su composición [imagen]. Tomada de http://www.semarnat.gob.mx/archivosanteriores/temas/residuos/solidos/Documents/guia-diseno.pdf
Los residuos provienen de diferentes fuentes y también presentan distintos manejos para su reciclaje y reutilización; por ello, se dividen en tres grupos básicos, según lo siguiente:
Residuos según su fuente de origen
Son producto de las actividades diarias del hogar, oficinas, comercio, escuelas, restaurantes o edificios que no tengan una actividad de transformación o proceso industrial.
Son los residuos resultantes de limpieza de calles, poda, recolección de objetos o mobiliario urbano y todo aquello relacionado con el funcionamiento de una ciudad o población.
Están compuestos de materiales o sustancias sólidas que sean descartadas en un proceso industrial. El manejo de los sólidos es a través de contenedores y no se incluyen residuos líquidos o gaseosos, ya que su manejo de desactivación es diferente al del residuo sólido.
No son reciclables y su manejo final es a través de la incineración. Todo aquello que estuvo en contacto con un ser humano en el carácter de prevención, tratamiento o corrección de algún padecimiento en la salud, deberá de ser tratado como residuo peligroso biológico infeccioso (RPBI), clasificación que denomina a residuos sobrantes de actividades clasificadas como peligrosas a la salud, por contener microorganismos que pueden provocar enfermedades. Principalmente, se encuentran en centros de salud, centros de investigación para la salud y escuelas de medicina.
Son resultado de los procesos y procedimientos constructivos; son inertes; su manejo y disposición final son de tipo específico; su gran volumen dificulta su tratamiento y no son reciclables en su mayoría. Su disposición son un problema sanitario.
Actualmente, se pueden reciclar los siguientes materiales:
Estos materiales se deben de preseleccionar y separar durante el proceso de obra en un sitio elegido, evitando el contacto con agentes químicos o aceites.
Residuos según su fuente de origen
Son compuestos o derivados de materia viva, las cuales se descomponen y pueden volver a la tierra (biodegradables); forman parte del ciclo natural. Cuando se descomponen son fuente de contaminación de aire, suelo y agua, y llegan a producir agentes infecciosos y plagas.
Son derivados de compuestos inorgánicos o de procesos industriales. Su principal característica es que requieren de un largo tiempo para descomponerse. En algunos casos no se descomponen y, por esa razón, se les denomina no biodegradables. Por tanto, su tratamiento deberá de ser de tipo industrial.
Residuos según su fuente de origen
En esta categoría se incluyen periódicos, revistas, hojas, facturas, formularios, carpetas, folletos, guías telefónicas y envases de cartón. Antes de tirarlos es importante eliminar por completo elementos compuestos de diferentes materiales: las grapas, cintas adhesivas o plásticos. Dentro de esta categoría no son reciclables: el papel de fax y carbónico, papeles plastificados, celofán, envases de comida, servilletas y papel de cocina, vasos usados, papel de fotos y etiquetas.
Las materias primas de los vidrios son, principalmente, sílice, alcaloides y estabilizantes como la cal. Suelen ser reciclables y la mayor parte de los vidrios se desechan dentro de las edificaciones en forma de botellas de bebidas y envases de alimentos, así como cristales de ventanas. Dentro de esta categoría no son reciclables: los focos fluorescentes, tubos fluorescentes, lámparas, espejos, lentes, tazas, macetas y otros objetos de cerámica, por su contenido de plomo, mercurio, talio, cadmio y otros metales. Se recomienda la separación del vidrio según sus características de conformación, en las siguientes subcategorías:
Dentro de las edificaciones, estos materiales forman parte de las tuberías, los cables eléctricos (cobre), soldaduras (estaño), marcos de ventanas (aluminio), y de los utensilios que se emplean en la cocina. Normalmente, las latas de aluminio y acero pueden ser recicladas para elaborar nuevas latas, sin que se pierda la calidad del material.
Estas sustancias incluyen químicos como aglutinantes y diversos pigmentos. Debido a que son muy inflamables, no deben desecharse junto con la demás basura y, por tanto, deben manejarse de manera específica. Existen pinturas con base de aceite y base de agua, y su tratamiento es diferente y no deben mezclarse.
Existen más de cien tipos de plásticos derivados del petróleo. En las edificaciones se desechan envases de productos de limpieza, bolsas de plástico y juguetes, entre otras cosas.
❖ Botellas de plástico PET: Pueden ser recicladas para volver a elaborar plástico nuevo. Por lo general, no son reciclables los plásticos de envases de comida y bebida, los de vasos y cubiertos desechables o macetas, sillas, mesas, etc.
❖ Botellas de plástico HDPE: Este tipo de plástico lo encontramos principalmente en las botellas de detergentes, blanqueadores, envases de leche.
El algodón y el lino suelen ser residuos reutilizables. No son reciclables las telas impregnadas con contaminantes, como pintura, combustible, etc.
Cuentan con materiales como cobre, aluminio, cadmio, plomo y litio. Se encuentran en una gran cantidad de aparatos eléctricos, teléfonos móviles, baterías de auto y otros. Son altamente contaminantes y tóxicas. Su manejo es de carácter especial por contener elementos de transmisión de carga eléctrica y porque su descomposición produce ácidos.
Un programa de reciclaje óptimo comprende de la adecuación del espacio destinado para realizar la separación en la fuente de los residuos sólidos, para posibilitar el reciclaje. A estos lugares se les denomina “puntos ecológicos” y se catalogan en tres grupos diferentes, según el tipo de material que se va a depositar para su separación: materiales reciclables orgánicos (papeles y cartones), materiales reciclables de manejo industrial (plásticos, vidrios y metales) y materiales no reciclables.
Un sistema óptimo de reciclaje consta de las siguientes etapas:
La clasificación y manejo de residuos sólidos, de acuerdo con los estándares de manejo es:
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Estrategias para el manejo de residuos sólidos
Se debe establecer un plan para el manejo y disposición de los siguientes residuos sólidos:
1. Residuos tóxicos de acuerdo con la normatividad vigente.
2. Medicamentos caducos.
3. Residuos electrónicos y eléctricos.
4. Residuos de riesgo biológico.
Cada uno de estos residuos debe de manejarse de manera diferenciada del resto de los residuos reciclables y no reciclables, y requieren de un proceso de neutralización. Para ello se deberá:
La composta
Es un ejemplo de recurso renovable, debido a que es un abono orgánico que se obtiene de la descomposición de compuestos que forman o formaron parte de seres vivos. A través del compostaje se obtiene este abono rico en sustancias necesarias para nutrir la tierra de elementos químicos que favorecen el crecimiento de las plantas.
El compostaje se forma de desechos orgánicos: restos de comida, frutas y verduras, aserrín, cáscaras de huevo, restos de café, trozos de madera, poda de jardín (ramas, césped, hojas, raíces, pétalos, etc.). Se recomienda separar los restos orgánicos que contengan grasas y aceites, ya que inhiben la proliferación de bacterias.
La descomposición de materia orgánica consta de dos fases o ciclos:
● Ciclo aeróbico (con alta presencia de oxígeno).
● Ciclo anaeróbico o metanización (con nula o muy poca presencia de oxígeno).
Estas fases se describen a continuación para mayor comprensión:
El compost o composta se obtiene de manera natural por medio de la descomposición aeróbica en una primera fase, en la cual los materiales orgánicos utilizados pasan por un proceso de molienda o pulverización, para que su descomposición sea más rápida. A partir de éstos, se hace una mezcla de componentes, que al estar en contacto unos con otros, da inicio a la fase de reproducción de bacterias aerobias con los residuos orgánicos de vegetales, animales, excrementos y purines (parte líquida altamente contaminante que rezuma de todo tipo de estiércoles animales). Durante este proceso se incluye agua necesaria para la proliferación y reproducción masiva de bacterias aeróbicas termófilas. Estas bacterias se encuentran en el ambiente y su nombre proviene de la producción de calor en el proceso de descomposición. Es importante señalar que en esta etapa hay ciclos de aireación de la composta, a través de volteos de la materia orgánica y generalmente este proceso se realiza a cielo abierto.
En esta etapa se debe de excluir el uso excesivo del agua que impida la aireación y oxigenación, ya que crea condiciones biológicas anaeróbicas malolientes y promueve la putrefacción de los residuos orgánicos. Por tanto, la fermentación la continúan otras especies de bacterias, hongos y actinomicetos.
El humus
Es otro ejemplo de recurso renovable, se le denomina humus al “grado superior” de descomposición de la materia orgánica. El humus supera al compost en cuanto abono; ambos son orgánicos. El humus es la sustancia compuesta por ciertos productos orgánicos de naturaleza coloidal que proviene de la descomposición de los restos orgánicos, por organismos y microorganismos benéficos (hongos y bacterias). Se caracteriza por su color negruzco, debido a la gran cantidad de carbono que contiene. Se encuentra principalmente en las partes altas de los suelos con actividad orgánica. Los elementos orgánicos que componen el humus son muy estables; es decir, su grado de descomposición es tan elevado que ya no se descomponen más y no sufren transformaciones considerables. La capa sobre la superficie del suelo tiene aproximadamente un espesor de cinco a seis centímetros.
Capas del suelo
Madera
El residuo de la madera que ha sido procesada, para algún uso específico, puede ser empleado para crear una biomasa sólida. Cuando el residuo de la madera pasa por un proceso, primero de pulverización y después de compresión, donde se forma un cilindro de aserrín, que es una gran fuente energética, llamada pellet. El aserrín de los pellet se aglutina de forma natural, utilizando la propia lignina de la planta; la lignina es un polímero orgánico que forma parte de las paredes vasculares que estructuran los tejidos soportantes de la planta. Se estima que el poder calorífico de un pellet, en comparación con la madera, es 400 veces mayor.
(s. a.) (s. f.). Pellet [fotografía].
A continuación, algunas de sus ventajas y desventajas:
Consulta los municipios de la república mexicana más vulnerables al cambio climático, colocando el cursor sobre la imagen para observar a detalle.
Biogás
El metano (CH4) o biogás es un hidrocarburo alcano no polar. Es producido durante el proceso de la descomposición orgánica, ya que es el producto final de la putrefacción anaeróbica de las plantas. Este gas es liberado a la atmósfera de manera natural; es incoloro e inoloro; constituye el 97 % del gas natural; y es altamente inflamable y explosivo.
El metano es uno de los gases de efecto invernadero producido por las bacterias primitivas denominadas archaea. Existen dos grandes grupos de bancos de metano: los que se encuentran en superficies terrestres, en donde las condiciones climáticas de baja temperatura (los "permafrost" o tierra permanentemente congelada) capturan el gas metano; y en los hidratos de metano que se encuentran bajo la superficie marina (depósitos de metano sumergidos): superan el doble de la cantidad total de combustible fósil existente en el planeta. Una unidad de los hidratos de metano equivale a 160 unidades de metano.
(s. a.) (s. f.). Estructura química del gas metano [imagen].
A continuación, algunas de sus ventajas y desventajas:
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Biomasa
Se considera biomasa a un grupo de productos energéticos y materia primas de tipo renovable que se originan a partir de materia orgánica, formada por vía biológica.
En la disciplina de la ecología está acepción se utiliza con el fin de poder medir la cantidad de materia. Un error muy común es confundir a la materia orgánica con la materia viva. Se debe de considerar que la materia orgánica, según se estudie o utilice, se medirá de diferente forma. La biomasa "viva" se referirá a la masa total de toda la materia que forma un organismo, una población o un ecosistema y tiende a mantenerse más o menos constante. Por lo general, se mide en unidades de masa por cada unidad de superficie.
Es importante que logres diferenciar los tipos de desechos producidos por los humanos, para lograr su clasificación y, de este modo, identificar las principales formas de reutilización y reciclaje, en beneficio del ser humano y el medio ambiente.
Distinguir los desechos y residuos producidos por los humanos es fundamental para determinar las formas de tratamiento, dependiendo su origen y clasificación. La cultura de reutilización y reciclaje es primordial para el beneficio de la sociedad y el ambiente en el que habita.
Fuentes de información
Documentos electrónicos
Cámara de Diputados del H. Congreso de La Unión. Ley General para la Prevención y Gestión Integral de los Residuos [Versión electrónica]. Última reforma publicada en el DOF 19/01/18. Consultada el 07 de septiembre de 2018 de http://www.diputados.gob.mx/LeyesBiblio/pdf/263_190118.pdf
SEMARNAT. (2014). Clasificación cromática. Consultado el 31 de octubre de 2018 de http://www.semarnat.gob.mx/temas/residuos-solidos-urbanos
SEMARNAT. (2014). Guía de diseño para la identificación gráfica del manejo integral de los residuos sólidos urbanos. Consultado el 31 de octubre de 2018 de http://www.semarnat.gob.mx/archivosanteriores/temas/residuos/solidos/Documents/guia-diseno.pdf
Sitios electrónicos
Real Academia Española. (30 julio, 2018). [Entrada: desecho]. Consultado de http://dle.rae.es/srv/search?m=30&w=desecho
Cómo citar
Hoyos, G. (2018). Los desechos como recurso. Unidades de Apoyo para el Aprendizaje. CUAED/Facultad de Arquitectura. Consultado el (fecha) de (vínculo)
